Tegucigalpa, Honduras.- El presidente de la Conferencia Episcopal de Honduras, Ángel Garachana, dijo este sábado que, es urgente la instalación de la Comisión Internacional contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (CICIH), para erradicar dichos flagelos.
«¿Y la CICIH? Sí. Sí. Es urgente poner los medios, buscar las ayudas, coordinar las instituciones que sea necesario para formar la conciencia social, erradicar la corrupción y la impunidad, sanar, reformar y consolidar un sistema de justicia imparcial, transparente y eficaz», indicó el obispo.
¿Y la CICIH? Sí. Sí. Es urgente poner los medios, buscar las ayudas, coordinar las instituciones que sea necesario para formar la conciencia social, erradicar la corrupción y la impunidad, sanar, reformar y consolidar un sistema de justicia imparcial, transparente y eficaz.
— Ángel Garachana (@GarachanaAngel) May 14, 2022
Garachana se refirió, un día después de que la misión exploratoria de las Naciones Unidas (ONU), enviada por su secretario general, António Guterres, concluyera su visita al país, que podría derivar en la instalación de dicho organismo.
En abril pasado, la Presidenta Xiomara Castro, solicitó apoyo a la (ONU) para instalar la CICIH en Honduras.
Lo que sería un segundo intento, luego del fallido proyecto con la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad (MACCIH).
La cual dependía de la Organización de Estados Americanos (OEA), que se había instalado en 2016, durante al administración pasada.
La Iglesia Católica y otros sectores sociales han respaldado la iniciativa de la Presidenta, para que la CICIH se instale por al menos dos períodos gubernamentales.
El viernes, luego de la reunión de la misión exploratoria de la (ONU) con la Presidenta Castro, el ministro de Transparencia, Edmundo Orellana, dijo que: «el Gobierno tiene la plena voluntad que la CICIH se instale en el país y tenga todas las garantías y el apoyo para que «pueda actuar con imparcialidad, con objetividad, sin limitación».
Orellana también aboga por que la CICIH funcione durante al menos dos períodos gubernamentales para que la lucha contra la corrupción y la impunidad tenga el efecto deseado.