Tegucigalpa, Honduras (26.11.2024).- Más de 9,000 personas privadas de libertad en las distintas cárceles de Honduras han sido enroladas en el proceso para obtener el Documento Nacional de Identidad (DNI), una iniciativa que no solo busca actualizar los datos de los reos, sino que también facilita la evaluación de su situación jurídica, de salud y el cumplimiento de la prisión preventiva.
Mario Díaz, coordinador de la Mesa Técnica para el Desinternamiento de Personas Privadas de Libertad, explicó que este proceso ha tenido lugar en varios centros penitenciarios del país, permitiendo identificar irregularidades y mejorar el manejo de las cárceles.
«Llevamos más de 9,000 privados de libertad enrolados en los centros penitenciarios donde ya se ha realizado este procedimiento», dijo Díaz.
El proceso de enrolamiento también ha permitido identificar a alrededor de 1,200 reos que ya han sido excarcelados bajo el mecanismo de libertad condicional.
A medida que se continúan los trámites, otros reclusos serán liberados de acuerdo con la información obtenida en los enrolamientos realizados en los últimos meses.
Evaluación integral de la situación penitenciaria
Además de actualizar los datos de los internos, las jornadas de enrolamiento también proporcionan información crucial sobre el cumplimiento de la prisión preventiva de los reclusos.
Díaz destacó que, durante el proceso, se ha podido detectar casos en los que la medida de prisión preventiva está por vencerse o ya ha expirado, lo que lleva a la inmediata revisión de sus casos y a buscar la excarcelación cuando corresponde.
“El enrolamiento nos permite detectar una serie de dificultades, especialmente en lo que respecta al cumplimiento de la prisión preventiva, las condiciones de salud de los internos, y los problemas relacionados con la administración de los centros penitenciarios”, comentó el magistrado.
El proceso también ha servido para identificar a aquellos reclusos que carecen de defensores y aquellos que se encuentran en situación de abandono por parte de sus representantes legales.
Díaz detalló que las visitas y los enrolamientos se han realizado en los centros penales de Siria, Francisco Morazán, Morocelí, El Progreso, Ilama, Támara y Choluteca.
Sin embargo, las labores en el centro penitenciario de Nacaome fueron suspendidas temporalmente debido a los efectos del fenómeno tropical Sara.
Próximos pasos
El coordinador de la Mesa Técnica señaló que el enrolamiento continuará el próximo año, con el objetivo de seguir detectando problemas en los centros penitenciarios y proponiendo soluciones para mejorar las condiciones de los reclusos y la gestión de los centros.
«Este proceso nos ha permitido detectar irregularidades que requieren atención urgente, como el vencimiento de las medidas de prisión preventiva, y nuestra intención es seguir trabajando para mejorar la administración del sistema penitenciario en el país», agregó.
A pesar de los avances, Díaz enfatizó que aún queda mucho por hacer, por lo que se continuará con las inspecciones y revisiones en otros centros penitenciarios en los próximos meses.
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