Según el analista, esta situación está poniendo en peligro el funcionamiento adecuado del Gobierno, ya que el presupuesto nacional debería haber sido aprobado antes del cierre del año.
“El presidente del Congreso Nacional no está cediendo a este tipo de presiones, lo cual es fundamental para el bienestar de la nación. El presupuesto del gobierno debía estar aprobado para poder funcionar adecuadamente a inicios de 2025”, expresó Matute.
El analista también comentó sobre la gravedad de la situación, señalando que el retraso en la aprobación del presupuesto podría afectar seriamente la ejecución de proyectos de desarrollo y el funcionamiento de las instituciones estatales.
Afirmó que, la constante interferencia de algunos sectores políticos con intereses particulares impide que el Congreso cumpla con su labor de manera efectiva.
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