Tegucigalpa, Honduras (03.12.2024).- El secretario de Seguridad, Gustavo Sánchez, confirmó este martes que varias empresas de seguridad privada en Honduras están siendo investigadas por presuntamente prestar servicios a estructuras del crimen organizado, incluidas redes de narcotráfico, maras, pandillas y grupos de extorsión.
Sánchez señaló que estas empresas operan con aparente legalidad, utilizando testaferros y profesionales del derecho para cumplir con los requisitos legales.
Sin embargo, en la práctica, las armas registradas bajo estas entidades terminan en manos de personas que brindan seguridad directamente a organizaciones criminales.
“Conforman empresas de seguridad privada, totalmente lícitas en apariencia, pero detrás hay toda una estructura diseñada para proteger intereses delictivos”, explicó el funcionario.
Revisión de permisos y medidas de seguridad
En respuesta a esta problemática, la Secretaría de Seguridad está replanteando los procesos administrativos y operativos relacionados con la asignación de permisos para empresas de seguridad privada.
El objetivo es garantizar un mayor control y evitar que estas entidades sean utilizadas como fachada por el crimen organizado.
El ministro también anunció que la Secretaría de Seguridad tiene previsto adquirir equipos tecnológicos y vehículos especializados para reforzar las operaciones en zonas de alta criminalidad.
Entre los equipos destacan las unidades Black Mamba, vehículos blindados ligeros diseñados para maniobrar en calles estrechas, y comandos móviles para desplazamientos en áreas rurales.
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