Tegucigalpa, Honduras (10.10.2024).- El Gobierno de la Honduras en el marco de la “Comisión Cero Deforestación al 2029”, intensifica medidas de defensa, protección y neutralización de los bosques de La Mosquitia.
Los bosques de esta zona forman parte del Corredor Biológico Mesoamericano en Olancho y Gracias a Dios, donde se ubica la Reserva de Biósfera de Río Plátano, sitio de patrimonio mundial por la UNESCO.
Cabe destacar, que el “Sitio de Patrimonio Mundial Natural de la Humanidad”, por lo que, su valor de conservación no es solo de interés nacional, sino también internacional.
En los últimos 20 años, La Mosquitia perdió cerca del 25 por ciento (%) de sus ecosistemas producto de la ganadería, plantaciones ilícitas y la explotación ilegal de sus recursos, en ese contexto; la UNESCO, incorporó en 2011, a la Biosfera del Río Plátano, dentro de la lista de patrimonios naturales que se encuentran en peligro, con el objetivo de impulsar medidas de conservación y frenar la deforestación.
Como consecuencia del incremento de las invasiones, el despojo de las tierras que por derecho se
encuentran tituladas de forma inalienable a favor de los concejos territoriales indígenas, el Gobierno de la República, por medio del Consejo Nacional de Defensa y Seguridad (CNDS), implementa medidas de neutralización de delitos ambientales y desalojos en las zonas núcleo de las áreas protegidas del país.
Los pueblos originarios Pech, Miskitos, Tawahkas y Garífunas, por medio de los Concejos Territoriales, a quienes les pertenecen las tierras por derecho comunal, se han pronunciado totalmente en contra de los despojos de sus tierras y reclaman saneamiento de sus territorios con el fin de poder conservar sus costumbres ancestrales en armonía con el medio ambiente.
Las zonas núcleo de la Reserva del Hombre y la Biosfera del Río Plátano, la biosfera de Tawahka Asangni y los bosques de La Mosquitia en Warunta y Mocorón, forman parte de las últimas reservas de bosques tropicales del planeta y representan el hogar de especies muy amenazadas en peligro de extinción como el jaguar (Panthera onca), la guara roja (Ara macao), el águila arpía (Harpia harpyja), el cocodrilo (Crocodilus acutus), el tapir (Tapirus bairdii), el oso hormiguero (Myrmecophaga tridactyla), Mono cara blanca (Cebus capucinus), el Manatí (Trichechus manatus), entre otros.
Las prácticas desmedidas de acaparamiento de tierra para la ganadería y agricultura expansiva e
insostenible, provenientes de la zona de Olancho y Colón, hacia Gracias a Dios, cada año ganan más terreno y en su paso descombran bosques milenarios, protegidos por el Estado de Honduras, con destrucción de flora y fauna silvestre para expansión de carreteras, asentamientos, narco laboratorios y descombro para cultivos ilícitos como plantas de coca.
Honduras se encuentra en un momento crítico y crucial para frenar la deforestación y la perdida de los recursos naturales dentro de las selvas del corredor biológico mesoamericano, por lo que, a través de la Fuerza de Tarea Interinstitucional Contra el Delito Ambiental (FTIA), se combatirán hasta última instancia los delitos contra el medio ambiente y se paralizarán todas las actividades ilícitas dentro de las reservas naturales, en cumplimiento a la ley del país.
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