Tegucigalpa, Honduras (23.03.2023).- La Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG) reiteró que no habrá escasez de granos básicos con pronósticos climáticos preliminares que son favorables para principales zonas productoras como los valles de Quimistán, en Santa Bárbara, Yoro, Copán, Catacamas, en Olancho, entre otras.
No obstante, las autoridades esperan otro informe más para abril próximo que será determinante para las recomendaciones de las siembras de primera que arrancan en mayo, dependiendo de la afluencia de lluvias.
La “Perspectiva Climática Estacional Preliminar, abril a agosto 2023” fue presentada por personal del Centro de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos) cumpliendo con informar de manera más sistemática a la población y especialmente a los productores, las condiciones climáticas para el desarrollo de los cultivos.
“Debido a las acciones de mantener abastecido el país de granos básicos, se dispone de granos básicos en los diferentes mercados del territorio nacional y se fortalece de manera continua, la reserva estratégica a través del Instituto Hondureño de Mercadeo Agrícola (IHMA), esto con el objetivo de enfrentar cualquier eventualidad”, aseguró la titular de la SAG, Laura Suazo.
“El trabajo interno que tenemos es la sensibilización a todo el país de evitar los incendios y las quemas para la preparación de los suelos, también continuaremos con las diversas acciones con el comportamiento del clima y orientaciones en las fechas de siembras”, explicó la funcionaria.
Además, se continuarán con los trabajos de las recomendaciones técnicas no solo para granos básicos, sino para la ganadería de acuerdo a las condiciones esperadas.
Los campesinos deben estar pendientes del próximo informe de las condiciones del clima para el 18 de abril, ya que se acercan las siembras del ciclo de primera y las informaciones serán más determinantes para el sector productivo.
Las expectativas por parte del gobierno difieren a lo estimado por la Asociación de Productores de Granos Básicos (Prograno) que prevé caída en las siembras, en especial, por impacto del cambio climático y desmotivación en agricultores.
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