Tegucigalpa, 21 de diciembre. Mediante el uso de ecofogones, el Gobierno del presidente Juan Orlando Hernández implementó un mecanismo que permite no solo mejorar la economía de los hogares hondureños al disminuir el consumo de leña, sino que también beneficia la salud de las familias mientras reduce los efectos del cambio climático por la reducción de emisiones de dióxido de carbono.
Los ecofogones son sustitutos más saludables y económicos con respecto a las estufas tradicionales que la mayor parte de las familias en las áreas rurales todavía utilizan en sus viviendas.
Estas estufas limpias forman parte del programa social Vida Mejor, bajo la sombrilla de Viviendas Saludables, donde se prioriza la calidad de vida de los hondureños al dotarlos de vivienda digna, la instalación de techos dignos, pisos de cemento, letrinas saludables, filtros de purificación de agua y los huertos familiares.
“Además, tiene un impacto positivo en la salud de las familias, ya que las enfermedades respiratorias se reducen hasta en un 50 por ciento gracias al ecofogón”, indicó el mandatario, quien se identificó tanto en este tema que en su campaña para presidente la gente le puso un apodo… ´Juan Fogón´.
Una iniciativa saludable
“Vida Mejor inició en Lempira, iniciamos a entregar y construir ecofogones, y existieron quienes nos criticaron por eso, pero les aseguro que ninguno de ellos cocinaba con leña, y no saben lo beneficioso que es para la economía, la salud de las familias, que en su mayoría usan fogones en estos sectores”, indicó la primera dama, Ana García de Hernández.
En 2012, antes de que el programa de Viviendas Saludables llegara a todos los rincones del país, y en base a 8.169,047 habitantes, en la mitad de las viviendas se utilizaba leña para cocinar. En el área rural, un 81 % de las viviendas utilizan leña para cocinar, mientras que en el área urbana en un 22 % de viviendas todavía se utilizaba este tipo de combustibles.
Desde el 2014, la Administración Hernández instaló unos 1,3 millones de estufas limpias en hogares hondureños de los 18 departamentos del país, quienes hoy dan fe del enorme impacto de este beneficio.
“Usted es propulsor de proyectos de cultura de salud que están teniendo un gran impacto en la calidad de vida de miles de personas”, le expresó la exsecretaria de Estado y exprimera dama de Estados Unidos, Hillary Clinton, al mandatario hondureño a finales de 2014 en el marco de la Alianza Global para las Cocinas Limpias que se realizó en Nueva York.
En esa oportunidad, Clinton recibió en su despacho al presidente Hernández y le prometió ayuda para apoyar la masificación del proyecto de ecofogones para que los mismos continuaran llegando a las familias más pobres de Honduras.
El siguiente año, Honduras inauguró la primera fábrica de ensamblaje de ecofogones, en el sector de Amarateca, Francisco Morazán.
El gobernante destacó que “con pequeños cambios estamos logrando grandes transformaciones en la vida de los más humildes, de la gente más luchadora de este país”.
Beneficios que cambian vidas
“Estamos contentos, muy agradecidos por este apoyo; gracias a mi ecofogón ahorro dinero en el gasto de leña, y con la chimenea el humo sale de la casa, y por eso no nos enfermamos del pecho. Antes el humo nos hacía mucho daño”, indicó Felícita Argueta, de 58 años, vecina de la colonia Melgar de Marcala (La Paz), quien recibió un ecofogón.
Después de utilizar un fogón tradicional durante 10 años, la salud de doña Adalinda Manzanares se benefició porque recibió un ecofogón del programa Vida Mejor.
“Antes hacía comida en un comal afuera, ahora voy a cocinar mejor porque tengo el ecofogón adentro; gracias al presidente, que nunca nos ha abandonado”, expresó María Fernández, mientras le instalaban la estufa ecológica.
Tanto Felícita como Adalinda están censadas en el Registro Único de Participantes (RUP), que registra de forma sistemática, ordenada y esquemática la situación socioeconómica de los hogares y población en condiciones de vulnerabilidad.
En total, 5.860.004 personas únicas han recibido un beneficio de Vida Mejor, entre estos los beneficios de Viviendas Saludables, donde están incluidos los ecofogones.
A solicitud del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el Centro Nacional de Información del Sector Social (Ceniss), ha realizado una revisión de los programas y proyectos del sector social contenidos en el Registro de la Oferta Institucional (ROI) y su vinculación directa de apoyar las mediciones de los avances del cumplimiento de Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
En ese sentido, se observa reducción de 4% en la prevalencia de infecciones respiratorias agudas (IRAS) y 4% en las diarreicas (EDAS) siendo ambas unas de las cinco causas de muertes de menores de cinco años, lo que significa que estamos salvando vidas.
De interés:
– Con el cambio de fogones tradicionales a ecofogones se disminuye el consumo de leña, generando beneficios económicos, sociales y ambientales, aportando bienestar a la familia.
– El humo proveniente de la quema de leña contiene muchos componentes nocivos y las prolongadas exposiciones a estos componentes afectan el sistema respiratorio, la vista, baja las respuestas del sistema inmune y aumentan la susceptibilidad a las infecciones y las enfermedades.
– También el humo está vinculado a tuberculosis, infecciones respiratorias agudas, enfermedad pulmonar obstructiva crónica y cáncer del pulmón.
– El uso de estufas ecológicas también tiene impactos ambientales al contribuir con la reducción de la deforestación y con la conservación de ecosistemas forestales, el mantenimiento de los stocks de carbono y la protección del suelo.