Tegucigalpa, Honduras (27.08.2024).- Este martes, se lleva a cabo en los tribunales de Materia de Criminalidad Organizada y Corrupción la audiencia de declaración de imputado en contra del exministro de Salud, Arturo Bendaña y otros exfuncionarios acusados de un fraude al Estado por más de 224 millones de lempiras.
El Ministerio Público, a través de la Fiscalía Especial para la Transparencia y el Combate a la Corrupción Pública (FETCCOP), presentó un requerimiento fiscal detallado contra exfuncionarios de la Secretaría de Salud y representantes de empresas mercantiles.
Las acusaciones se centran en compras irregulares de medicamentos, suministros médicos, equipo quirúrgico y de laboratorio que resultaron en un desfalco significativo para el Estado de Honduras, con un monto total de L224,994,921.30.
Los imputados en este caso son:
- Arturo Bendaña Pinel (exministro de Salud),
- Miguel Ernesto Flores Cisneros,
- Moisés Torres López,
- Vinicio David Monterrosa Sierra,
- Roberto Carlos Meza Figueroa,
- Vanessa María Urbizo Escobar,
- Nelson Geovanny Alvarenga Rodríguez,
- Reynaldo Leiva Suazo,
- Carlos Octavio Rivas Sánchez (exjuez de Letras de lo Civil).
Los cargos incluyen fraude, prevaricato administrativo, falsificación de documentos públicos, violación de los deberes de los funcionarios y encubrimiento.
Las investigaciones revelan que, entre 2010 y 2012, los acusados llevaron a cabo un esquema de corrupción que incluyó contratos fraudulentos, licitaciones amañadas y una figura inexistente llamada “xtrafinanciamiento”.
Esta estrategia permitía adquirir productos bajo la apariencia de créditos, facilitando el fraude. Además, el exjuez Carlos Octavio Rivas Sánchez habría facilitado la corrupción mediante resoluciones favorables a las empresas involucradas, utilizando actas y documentos falsificados.
El esquema corrupto orquestado por esta red ha tenido graves consecuencias para la población hondureña. La falta de medicamentos y suministros médicos dejó a miles de ciudadanos en una situación precaria, obligándolos a viajar largas distancias y enfrentarse a un sistema sanitario insuficiente.
Muchos de estos pacientes regresaron a sus hogares decepcionados y abandonados, enfrentando situaciones de salud comprometidas y, en algunos casos, la muerte.
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