Londres, Inglaterra (08.09.2022).- La nueva primera ministra británica, Liz Truss, expresó este jueves en el Downing Street que el Reino Unido está «devastado» y en estado de «conmoción» por la muerte de la reina Isabel II a los 96 años en Balmoral, en Escocia, y calificó a la soberana de fuente de «estabilidad» y «fortaleza» para el país.
En una declaración a la nación ante la residencia oficial, Truss señaló que Isabel II fue «la roca» del Reino Unido moderno, al acceder al trono después de la II Guerra Mundial.
«Inauguramos una nueva era en la magnífica historia de nuestro gran país, exactamente como su majestad hubiera deseado al pronunciar las palabras: «Dios salve al Rey», ha proclamado.
Las escuetas palabras de Truss han abundado la aportación de Isabel II a la historia británica e internacional, con la estabilidad y fortalecimiento de su nación y la ampliación de la Commonwealth. «Nuestro país ha crecido y florecido bajo su reinado. Gran Bretaña es el gran país que es hoy gracias a ella», ha destacado.
Isabel II, «admirada y amada por los ciudadanos de Reino Unido y de todo el mundo», ha sido también una «inspiración» para la misma Truss, que ha destacado la dedicación de la reina al cumplimiento de su deber. Así, la «determinación por llevar a cabo sus tareas», le animó incluso a nombrarla primera ministra, apenas unos días antes de su fallecimiento.