Tegucigalpa, Honduras (11.09.2024).- En un vibrante debate celebrado el jueves en Filadelfia, los dos principales candidatos a la presidencia de Estados Unidos, la vicepresidenta Kamala Harris y el exmandatario Donald Trump, protagonizaron un intercambio repleto de ataques personales y tensiones.
Organizado por la cadena de televisión ABC News, el encuentro podría haber sido el único cara a cara entre los aspirantes a menos de dos meses de las elecciones del 5 de noviembre, cruciales para determinar si los demócratas prolongan su mandato o si Trump retorna a la presidencia.
El debate estuvo marcado por la exasperación del republicano Trump, quien recurrió a diatribas cargadas de falsedades sobre migración, las elecciones de 2020 y el aborto.
Por su parte, Harris mantuvo la calma, respondiendo con gestos faciales expresivos a las provocaciones y evitando preguntas sobre sus puntos débiles.
Fuentes cercanas al expresidente indicaron que su actitud defensiva causó «frustración» entre sus aliados, quienes lo habían preparado para no caer en las «trampas» de Harris.
Un momento particularmente tenso se produjo cuando Trump reaccionó de manera explosiva a un comentario de Harris, quien había insinuado que sus seguidores se marchan de sus mítines debido a su aburrimiento.
Trump, en su respuesta, diseminó información falsa sobre migrantes haitianos, lo que provocó risas de su contrincante.
Los ataques personales fueron una constante durante el debate. Harris acusó a Trump de ser una «desgracia» para la democracia y de intentar convertirse en un «dictador», mientras que Trump tildó a Harris de «radical» y «marxista», además de criticar la falta de un plan claro para el país.
La vicepresidenta utilizó la «pantalla dividida» del debate para manifestar su escepticismo mediante miradas y gestos mientras Trump hablaba. A diferencia de ella, el republicano mantuvo una postura rígida y casi no miró hacia Harris durante el encuentro.
En cuanto a los temas tratados, Trump intentó enfocar la discusión en la migración, tema prioritario para los estadounidenses en las elecciones. A pesar de sus intentos de vincular a Harris con la política migratoria del presidente Biden, ella evitó profundizar en el tema y se limitó a expresar su apoyo a las restricciones actuales al asilo.
El aborto también generó fricciones, con Harris prometiendo una ley federal para proteger el derecho al aborto, mientras que Trump defendió las excepciones a las restricciones en casos de violación, incesto y peligro para la vida de la madre. Otros temas discutidos incluyeron la guerra en Ucrania, la situación en Gaza y las elecciones de 2020, con ambos candidatos presentándose como la opción más sensata para el país.
Las encuestas actuales indican una carrera estrecha, con Harris liderando a Trump por solo 2,7 puntos porcentuales a nivel nacional, según el agregador de encuestas FiveThirtyEight.
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