Tegucigalpa, Honduras (28.04.2025).- En una mañana histórica para el deporte catracho, la Selección Femenina de Futsal de Honduras protagonizó una de las gestas más épicas al clasificar al Premundial de Concacaf, tras vencer 6-5 a Nicaragua en un duelo dramático que se definió en tiempo extra, en el Domo Polideportivo de Ciudad de Guatemala.
Las guerreras de la H no solo mostraron fútbol, mostraron carácter. Exhibieron una garra inquebrantable que, aún en los momentos más adversos, nunca dejó de latir fuerte sobre la duela.
𝙐𝙣𝙖 𝙥𝙧𝙞𝙢𝙚𝙧𝙖 𝙢𝙞𝙩𝙖𝙙 𝙙𝙚 𝙖𝙪𝙩𝙤𝙧𝙞𝙙𝙖𝙙 𝙘𝙖𝙩𝙧𝙖𝙘𝙝𝙖
Desde las 11:00 de la mañana, Honduras salió a la cancha con decisión absoluta. Raquel Alvarado, con un soberbio tiro libre, abrió el camino hacia el sueño. Katherine Amador, la gran artillera de la jornada, no tardó en aparecer: primero cazando un error rival y luego firmando su segundo tanto con un remate certero, para colocar el 3-1 parcial al descanso.
Nicaragua apenas pudo descontar gracias a Reina Hernández, pero el primer acto cerraba con dominio catracho y una ilusión encendida.
𝙐𝙣 𝙨𝙚𝙜𝙪𝙣𝙙𝙤 𝙩𝙞𝙚𝙢𝙥𝙤 𝙡𝙡𝙚𝙣𝙤 𝙙𝙚 𝙙𝙧𝙖𝙢𝙖 𝙮 𝙘𝙤𝙧𝙖𝙟𝙚
La segunda mitad fue una montaña rusa de emociones. Reina Hernández y Rosa Mena igualaron las acciones para Nicaragua, y luego María Arvizu empujó a las pinoleras hacia una remontada 5-3 que parecía enterrar el sueño hondureño.
Pero Honduras, fiel a su espíritu guerrero, se negó a caer. Linda Moncada descontó para el 5-4 y, en un acto de fe, Katherine Amador selló su hat-trick con una definición fría y oportuna para igualar 5-5 y enviar el juego al tiempo extra.
En ese tramo de agónica tensión, brilló como nunca la figura monumental de Nelly Cruz, la portera hondureña, que fue una muralla inquebrantable bajo los tres palos, sosteniendo al equipo en los momentos más críticos.
𝙏𝙞𝙚𝙢𝙥𝙤 𝙚𝙭𝙩𝙧𝙖: 𝙀𝙡 𝙖𝙡𝙢𝙖 𝙙𝙚 𝙪𝙣 𝙥𝙪𝙚𝙗𝙡𝙤 𝙚𝙣 𝙡𝙖 𝙙𝙪𝙚𝙡𝙖
Cuando la fatiga era total pero el orgullo nacional seguía encendido, apareció de nuevo Raquel Alvarado en el segundo tiempo extra. Con temple y calidad, la mediocampista definió el 6-5 que terminó siendo el gol de la clasificación.
En los últimos minutos, Honduras defendió cada pelota como si fuera la última, con una muralla defensiva comandada por la heroica Nelly Cruz y la entrega absoluta de todas sus jugadoras.
𝙐𝙣 𝙗𝙤𝙡𝙚𝙩𝙤 𝙜𝙖𝙣𝙖𝙙𝙤 𝙘𝙤𝙣 𝙝𝙤𝙣𝙤𝙧
Con el pitazo final, Honduras no solo ganó un partido: ganó respeto, ganó historia, ganó la admiración de quienes vibraron con su valentía. Nicaragua fue un rival de mucha categoría, tienen talento y lo denostaron.
Ahora, las catrachas formarán parte del Grupo B del Premundial de Concacaf, donde enfrentarán a gigantes como Estados Unidos, Canadá y Costa Rica. La historia sigue. Y Honduras, llena de orgullo y coraje, ya dejó claro que cuando el corazón late fuerte, no hay rival invencible.
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