Tegucigalpa, Honduras (05.06.2025).- Alrededor de 185 segundos bastaron para que España desarmara a Francia en una de las semifinales más emocionantes de la Liga de Naciones.
La Roja, con una mezcla de juventud, talento y determinación, se impuso por 5-4 en un duelo que tuvo de todo: goles, ritmo vertiginoso y un nuevo capítulo dorado de esta generación dirigida por Luis de la Fuente.
Con Cristiano Ronaldo y Portugal ya clasificados a la final, todas las miradas estaban puestas en un duelo de alto voltaje entre españoles y franceses.
Pero lo que nadie esperaba fue que España resolviera el partido en apenas tres minutos y cinco segundos, del 21:52 al 24:57 del primer tiempo.
Un vendaval español
El primero en golpear fue Nico Williams, quien definió con clase tras una jugada armada desde la derecha por Lamine Yamal y Mikel Oyarzabal.
El extremo del Athletic no solo abrió el marcador, también celebró con un festivo baile junto al joven Dean Huijsen, símbolo del desparpajo de esta nueva generación.
Apenas tres minutos después, Mikel Merino amplió la ventaja con un remate certero.
En el mismo escenario donde marcó el gol que eliminó a Alemania en la pasada Eurocopa, el centrocampista volvió a brillar en su «territorio» de Stuttgart, firmando su cuarto tanto con la selección.
Francia, con un ataque de lujo —Mbappé, Dembélé, Olise y Doué suman 111 goles esta temporada—, no pudo frenar la avalancha.
Yamal, Pedri y una goleada histórica
El segundo tiempo no trajo alivio para los de Deschamps. En el minuto 53, Lamine Yamal transformó un penalti cometido sobre él mismo para el 3-0.
Sólo 98 segundos después, Nico Williams asistió a Pedri, quien firmó el cuarto gol con una gran definición.
El 5-1 llegó al minuto 66: otra vez Yamal, esta vez tras un pase perfecto de Pedro Porro. El joven extremo del FC Barcelona suma ya seis goles en 20 partidos como internacional, tres de ellos ante Francia.
Fue una noche de récords: España no le marcaba cinco goles a Francia desde 1949.
Francia reaccionó, pero no alcanzó
Pese al golpe inicial, Francia no se rindió. Ryan Cherki descontó con el 5-2. Luego un autogol de Dani Vivian puso el 5-3 y, finalmente, Kolo Muani marcó el 5-4. Pero ya era tarde. El daño estaba hecho desde el primer tiempo.
Con esta victoria, España se clasifica por segunda edición consecutiva a la final de la Liga de Naciones, donde buscará coronarse ante Portugal. Lo hace con una propuesta vibrante, confiada y letal, que demuestra que esta nueva generación tiene argumentos para soñar con todo.
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