Tegucigalpa, Honduras (16.04.2023) Con su imponente diseño esquinero de media manzana, mostrando tres aristas de su esbozo neoclásico de 1915, se distingue el edificio de la Escuela Nacional de Bellas Artes (ENBA), la cual en sus inicios albergó la antigua Alcaldía de Comayagüela hasta su anexión a la municipalidad del Distrito Central en 1937.
“Contamos con un edificio que es patrimonio cultural nacional y pertenece a todos los hondureños. Es un edificio con valor, más los murales agregados al sitio, entonces debe ser una actitud de respeto y de valorar», aseguró el jefe del departamento de Pintura, Gabriel Zaldívar.
Este antiguo inmueble es parte de los 21 bienes invaluables de la Gerencia del Centro Histórico de la comuna capitalina.
El edificio está ubicado frente al parque La Libertad, entre la segunda y tercera avenida, sexta calle de Comayagüela, que desde el 1 de febrero de 1940 alberga a la ENBA.
Este edificio esconde fragmentos y piezas de la historia de Honduras como un viaje al pasado en una máquina del tiempo.
Al adentrarse en la infraestructura, se denota como eje central un patio que define cuatro áreas principales, el Salón de Gran Escala, tanto en planta como en altura que era la sala de reuniones de las antiguas autoridades edilicias.
Cuenta con un techo decorado con mosaicos verdes, cuatro candelabros clásicos, un pasillo superior interno,
lugar desde donde a las personas les gustaba ver mejor las fiestas que realizaban en aquella época y que ahora decoran el lugar, muestran la belleza de la arquitectura clásica.
La obra más reluciente para los visitantes e incluso los estudiantes del centro educativo, es el pasillo Maya: paredes pintadas con bocetos del antiguo imperio mesoamericano, esfinges de los números, calendario, arcos y esculturas, son el mensaje de la rica cultura de nuestros ancestros precolombinos y que su significado
en el edificio es renacer nuestras raíces cuando se recrearon en los años 40.
ENBA, única institución pública que enseña arte en el país
Con 83 años de existencia, la institución es la única en el país que enseña el arte y al ir creciendo
a través del tiempo, se construyeron otras aulas para impartir talleres de restauración, escultura, dibujo, pintura, una biblioteca y otros espacios con permisos y certificados de infraestructura del Instituto Hondureño de Antropología e Historia (IHAH).
La enseñanza de Bellas Artes está relacionado a las artes plásticas y esto lo hace a través de cinco
talleres como: escultura, cerámica, escultura en madera, restauración, y artes gráficas y pintura.
Asimismo, el Bachillerato Técnico Profesional en Artes Plásticas y el Bachillerato Técnico Profesional en Gestión Cultural, que duran tres años.
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