Tegucigalpa, Honduras (08.02.2023).- Cinco jugadores argentinos de rugby fueron condenados a cadena perpetua luego del asesinato a golpes del joven Fernando Báez Sosa, ocurrido hace tres años en el país de América del Sur.
El fallo final leído en la sentencia donde estuvieron presentes los padres de Báez Sosa, fue por homicidio doblemente agravado y los acusados son Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Matías Benicelli, Luciano Pertossi y Enzo Comelli.
Por otra parte, a los otros acusados de participes secundarios del horrendo crimen fueron condenados a 15 años de prisión. Los señalados y enjuiciados son Blas Cinalli, Lucas Pertossi y Ayrton Viollaz.
La lectura de la sentencia se transmitió en directo por televisión. En Dolores, a 220 kilómetros al sur de Buenos Aires, decenas de personas expresaron su solidaridad con los padres de Báez Sosa.
En el verano del año 2020, los condenados vacacionaban en ese balneario sobre la costa atlántica argentina muy popular entre los jóvenes.
Esa noche fueron expulsados de una discoteca en la cual había comenzado una pelea. En la calle, los rugbiers aislaron a Báez Sosa y lo agredieron a puños y patadas, en una paliza que le provocó la muerte por múltiples lesiones.
Durante el juicio, los imputados, por momentos mostraban su arrepentimiento entre lágrimas, expresaron cosas como: “Pido perdón”, “pido disculpas”, “no hubo intención de matar”, “no hubo un plan (de asesinar)” y “estoy arrepentido”.
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