Santos Fernando Flores, un rescatista y apasionado poeta hondureño

Tegucigalpa, Honduras (09.10.2022).- Santos Fernando Flores Alvarado es un hondureño apasionado por la Biología, las causas y luchas sociales, la poesía y sobre todo poseedor de un gran don de servicio, con el que ayuda a los ciudadanos durante las emergencias.

Flores Alvarado es también un poeta, que compagina esa faceta con el voluntariado en la Cruz Roja Hondureña, donde está siempre a la orden y a disposición de la población, por desarrollar estas actividades es la razón por la que ahora le llaman el rescatista de la poesía.

El rescatista hondureño nació en Tegucigalpa municipio del Distrito Central (M. D. C.), el 03 de mayo de 1981.

Para él, su familia son lo más importante en su vida y proclama el amor hacia su hijo Fernando Sebastián, a quien desde antes de nacer llama de cariño, “Mi corazón del cielo”.

Asimismo, sus padres, Santos Pastor Flores (QEPD) y Camila Alvarado Maradiaga. Sus Hermanos Mario, Fátima, Luisa (QEPD), Suyapa, Marcial, Felipe y Marcos, forman parte de ese núcleo fundamental en su vida.

Finalmente, algunos compañeros de la vida que también forman parte de mi vida, entre ellos Amigos de toda la vida de la Cruz Roja, de la banda de rock nacional Delirium.

Conozcamos un poco más sobre Fernando Flores en esta entrevista exclusiva para redacción web de Canal 8

1 ¿Cómo recuerdas tu infancia y etapa escolar? 

Excelente, no tengo ninguna queja al respecto, mis maestros junto a mis padres fueron los precursores a que me introdujera en el mundo del arte.

Siempre fui alguien apasionado por lo que hacía, producto de eso siempre estuve en la pizarra de excelencia académica.

Sus estudios:

Escuela República de Chile en Tegucigalpa, mi ciclo común de cultura general en El Instituto Central Vicente Cáceres.

El diversificado en dos partes, estudié Bachillerato en Administración de empresas en el INTAE hace muchos años.

Posteriormente, estudié Bachiller Técnico en Hostelería y Turismo en el Republica de Francia, actualmente y desde hace unos años sigo con mi licenciatura en Biología en la UNAH.

2 ¿Qué sería eso que te gustaría revivir de tu infancia? 

Pregunta difícil, tantas cosas que ahora con el ir y venir de los años solo han quedado en recuerdos, aunque te diré… uno nunca deja de ser niño, siempre habrá algún detalle allá en lo más profundo de tu ser qué te identifique como niño.

3 ¿Cómo fue tu etapa de adolescente y colegial? 

Siento que fue una etapa normal con sus respectivos altibajos y todo lo que representa la adolescencia.

Fui rebelde en mi colegio, forme parte de las asociaciones estudiantiles de la época, pero nunca descuide la enseñanza y no baje mis índices académicos.

Luego entré a formar parte de la más grande institución humanitaria a nivel mundial y enfoque toda esa energía y fuerza que caracteriza a la juventud en poder ayudar a las personas más vulnerables en Honduras, a través de mi voluntariado en Cruz Roja.

4 -¿Hay algo de arrepentirse de esa etapa? 

No, y si tuviera la oportunidad de volver a vivirla, volvería a hacer lo mismo una y mil veces tal vez sin tanto miedo como al inicio, pero no me arrepiento de nada, esa etapa me transformó en una persona más solidaria, más comprometida, más empática, sociable, más justa, en pocas palabras MÁS HUMANA.

5 -En relación con tu edad ¿qué no repetirías y qué hiciste durante tu etapa adolescente? 

Pues creo y siento que he vivido mi vida a lo grande, en todas y cada una de las etapas que hasta los momentos me ha tocado afrontar.

No niego que muchas veces el factor desempleo y crisis financieras me han doblegado, pero de una u otra forma he logrado librar las batallas y salir adelante.

A veces solo sin ayuda de nadie y otras más, con el apoyo de mi familia y amigos cercanos.

Como todo niño y adolescente tuve y tengo aún mis sueños. Entre ellos puedo mencionar algunos, viajar, ver crecer a mis hijos. Asimismo, conocer toda Honduras, pilotear un avión, lanzarme con paracaídas, escribir un libro, subir el Everest.

También, conocer otras culturas y sus gentes, ganar un Nobel, etc. Algunos de ellos ya se han cumplido y espero Dios me de vida para cumplir un par más.

6 ¿Cómo nació la pasión por la escritura?

Desde pequeño recuerdo que mis padres a pesar de solo haber culminado su escuela primaria, me apoyaron para que continuara con mis estudios desde pequeño.

Mi papá con sus pocos ingresos laborales me obsequiaba libros para que los leyera y desde ahí nació ese amor por la literatura.

Recuerdo mi bibliotecaria en la escuela del barrio, Graciela creo que se llamaba, a la hora del recreo siempre la iba a visitar para que me prestara un libro y poder leerlo, luego ella misma me los prestaba para que los llevara a mi casa y pudiera avanzar para luego empezar uno más y otro más y otro, hasta convertirme en un “ratón de biblioteca”

7 ¿Cómo nació la pasión de ser rescatista de la Cruz Roja? 

Alla en mi preadolescencia, uno de mis hermanos mayores era socorrista voluntario de la Cruz Roja y cuando llegaba a la casa contaba las aventuras que se vivían a diario dentro de una ambulancia, en muchas ocasiones el me llevo a los turnos que hacían y mientras él iba a atender un llamado de emergencia yo quedaba en la sede, empapándome del mundo de la Cruz Roja, porque eso es lo que es, es un Universo de actividades, acciones y programas en pro del bienestar y ayuda a los más necesitados, cuando cumplí la edad necesaria para poder entrar, me enliste como voluntario y ya hoy 25 años después de ese memorable día, continuó como se dice “Al pie de la bandera” esforzándome en poder ayudar a los más vulnerables.

 

8¿Cómo te ayuda el pertenecer a la Cruz Roja con lo de escribir poemas?

Bien, el hecho de pertenecer a la Cruz Roja me ha brindado la oportunidad de conocer a tantas personas que han marcado mi vida.

También, lugares, escenarios que han servido de inspiración en más de una ocasión a mis escritos.

Ese contacto tan directo con la solidaridad, la esperanza y la humanidad que conlleva portar el emblema de la Cruz Roja en tu pecho te motiva.

También, a no dejar de escribir y contar historias a través de las líneas y párrafos de tus escritos desde otro punto de vista.

9-¿Cómo se llaman tus libros, de qué tratan? 

Bueno, en realidad tengo varios títulos sobre la mesa, la mayoría de poesía, listos para ser editados e impresos.

Por decir algo, entre ellos podría mencionar: “De mi ser”, “Horizontes”, “Tierra Adentro”, “Un silencio desde los cielos”, Espíritus del bosque”.

Asimismo, “Mirando al infinito (compilación)”, “Canto de rebelión (compilación)”, “Sueños, Anhelos y deseos (compilación con la cual participe en el Premio Internacional de poesía Rubén Darío, Nicaragua 2019)”.

En Físico y gracias al apoyo incondicional de Editorial Arttegrama y el “Circulo de escritores de La Legua” con sede en Santiago de Chile.

Los libros de Fernando Flores

Pude cumplir mi sueño de editar y publicar mi primera antología poética, la cual titulé “Corazón del Cielo” en honor a mi hijo que estaba próximo a nacer en el año 2017.

Antología que reúne algunos de los poemas que he escrito desde inicios de mi adolescencia hasta la fecha, fue un largo proceso de solicitudes de apoyo y ayuda que no fueron atendidas en Honduras, hasta que Chile dijo: Creemos en vos y te apostamos a vos, producto de ello se lanzó la primer edición de este poemario a finales de 2021 pero por motivos del costo del traslado de ejemplares y por el cierre también de las fronteras a raíz de la pandemia COVID-19, pudo llegar a Honduras a mediados de este año.

Actualmente, también estoy incursionando en otras ramas literarias escribiendo algunos títulos en narrativa: “Travesía” Novela que habla de unos jóvenes ávidos de aventuras que se internan en la Mosquitia hondureña en busca de la “Ciudad Blanca”.

“Crónicas de un Sicario” Novela ficticia que narra la vida de alguien dedicado a realizar este tipo de hechos delictivos.

Y un tercer título llamado “Mi hermano el presidente” que creo no necesita introducción alguna para saber de qué trata.

–Consejo de Fernado Flores para nuevos escritores que deseen publicar: 

Nunca bajen la guardia, la literatura en Honduras como tal, nunca ha sido fácil de llevar adelante.

Es un largo proceso de desilusiones, cierre de puertas, negativas incluso de las mismas autoridades, falta de compañerismo en muchísimas ocasiones.

Incluso, de tus mismos compañeros de arte, envidia y muchas cosas más que por falta de espacio en la nota me quedo corto, pero todo lo resumo a que “Nunca abandonen sus sueños, la vida es dura, difícil, te golpea muchas veces, te tira al suelo y no vez la luz, pero siempre que tu Esperanza y tu determinación sea más grande que tus adversidades, podrás seguir luchando, levantándote y  logrando alcanzar tus metas, sueños y aspiraciones, y ya pronto empezaras a cosechar triunfos y reconocimientos en tu vida.” Si te cierran una puerta, toca diez más o cien, que más de alguna se abrirá a ti, nunca te desanimes y siempre lucha por alcanzar tus objetivos, por experiencia propia lo digo.

-Expectativas a futuro sobre tu libro y el arte en Honduras

Creo que como todo escritor nacional lo desea, me gustaría que existiera más apoyo al mundo de las artes en Honduras.

No solo a la Literatura, si no que, a todas las expresiones de arte existentes, gracias a la iniciativa de la excelentísima señora Presidenta Iris Xiomara Castro Sarmiento y a las gestiones de la actual ministra de Arte y Cultura Anarella Vélez se ha notado el cambio, se han abierto muchas más oportunidades para la edición y tiraje de libros, la creación de espacios como ferias y festivales relacionados con el arte, el apoyo incondicional a los escritores y artistas en general para que exploten sus talentos, esperemos este sea solo el inicio del resurgimiento del arte en Honduras, y que alcemos vuelo de entre las cenizas como Ave Fénix y podamos entre todos volver a posicionar a Honduras entre los países con un mayor índice de lectores y de apoyo al arte de América Latina.

Fernado Flores nos comparte un poema de su autoría dedicado al General Francisco Morazán:

Morazán

Ya no se escuchan más, los lentos pero firmes pasos

De tu impetuoso corcel;

Ni se oye el grito de batalla, de tu tosca voz

Que hacía temblar a tus enemigos.

 

El brillo del acero

De tu espada justiciera,

Ha quedado opacado

En lo profundo del olvido.

 

Pero

Nuestra pequeña Honduras

Te sigue recordando,

Como uno de sus más amados hijos.

 

Aquel que ofrendo su vida

Por una Centroamérica unida,

Basándose en los ideales

De libertad y justicia.

 

Valiente general

Héroe de mi infancia,

Dios permita que el tiempo infame

No te deje en el olvido.

 

Y tus principios y anhelos

Permanezcan siempre vivos,

En lo más profundo del corazón

De nosotros, tus hermanos hondureños.

 

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