Tegucigalpa, Honduras (03.10.2022).– El gran país sudamericano se encuentra a la espera de la segunda vuelta de elecciones para nombrar a su próximo mandatario el próximo 30 de octubre.
El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, con el 47,93 % de los votos válidos en las elecciones de este domingo en Brasil, tendrá que definir la Presidencia en una segunda vuelta contra el actual mandatario, Jair Bolsonaro, quien obtuvo el 43,63 %, según los datos oficiales.
Según informes del Tribunal Superior Electoral (TSE) de ese país, tras haber sido escrutado el 97,45 %, de acuerdo con las leyes de la estadística, ningún candidato podrá conseguir más de la mitad de los votos, cifra necesaria para garantizar la elección sin necesidad de segunda vuelta, por ende, Bolsonaro ya no podrá superar a Lula.
Bolsonaro, que aspira a la reelección, consiguió en las urnas una diferencia menor de cuatro puntos porcentuales frente a Da Silva.
El expresidente da Silva (2003-2010) era señalado por todos los sondeos como el favorito para imponerse con una amplia ventaja; sin embargo, no logró alcanzar más de la mitad de los votos que esperaba para garantizar la elección este domingo y sufrió duros reveses en algunos estados, como el estratégico Sao Paulo.
Al mismo tiempo el gobernante Bolsonaro venció en el mayor colegio electoral de Brasil, con el 47,7 % de los votos válidos, frente al 40,8 % del exmandatario.
Por otro lado, los resultados para el tercer colegio electoral, Río de Janeiro, la ventaja de Bolsonaro fue aún mayor, con el 50,9 % frente al 40,7 % de su rival.
Bolsonaro es el primer presidente brasileño en intentar ser reelegido y que, queda en segundo lugar durante la primera vuelta.
Antecedentes
Desde que Brasil recuperó la democracia en 1985 tan solo un presidente consiguió ser elegido en la primera vuelta: Fernando Henrique Cardoso garantizó su elección en 1994 y su reelección en 1998 con más de la mitad de los votos.
Lula, líder del Partido de los Trabajadores (PT), perdió tres elecciones (1989, 1994 y 1998) antes de ser elegido por primera vez, pero tuvo que ir a la segunda vuelta en 2002 y cuando se reeligió en 2006, así como le ocurrió a su ahijada política y sucesora Dilma Rousseff en 2010 y 2014.
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