Tegucigalpa, Honduras (09.02.2025).- El Estadio Olímpico Metropolitano de San Pedro Sula fue el escenario de una noche mágica y llena de emociones. Más de 30 mil aficionados fueron testigos de un espectáculo de primer nivel, con Lionel Messi y el Inter Miami brillando en un partido amistoso donde aplastaron 0-5 a un noble pero inofensivo Olimpia.
El partido marcó el cierre de la pretemporada para el equipo de la MLS, tras su gira por Latinoamérica enfrentando a clubes como América de México, Universitario de Perú y San Miguelito de Panamá.
Pero esta vez, la atención no solo estaba en el juego, sino en la primera presentación de Messi en suelo hondureño, un evento que quedará grabado en la memoria de los aficionados.
Primer tiempo
Desde el primer minuto, el Inter Miami dejó claro que venía a imponer su estilo. Messi y Suárez comenzaron a combinarse desde temprano, con el astro argentino probando un disparo de volea que pasó por encima de la portería de Edrick Menjívar.
El Olimpia intentó responder con un remate de Jorge Benguché, pero el arquero Oscar Ustari frustró su intento.
Sin embargo, al minuto 27, el momento esperado por todos llegó: un pase filtrado dejó a Luis Suárez en una posición inmejorable, quien no fue egoísta y sirvió para que Messi definiera de zurda.
Los «Merengues» buscaron reaccionar, pero los errores les pasaron factura. En el minuto 39, tras una pérdida de balón de Jorge Álvarez, Messi asistió a su compatriota Federico Redondo, quien definió con categoría para el 0-2.
Cuando parecía que el primer tiempo finalizaría así, Noah Allen aprovechó un rechace de Menjívar tras un intento de Messi y puso el tercero para el Inter Miami en tiempo de descuento.
Segunda parte
El segundo tiempo mantuvo el dominio del equipo dirigido por Javier Mascherano. Suárez, quien buscaba su gol, lo encontró al minuto 60 con una definición entre las piernas del arquero olimpista.
El público se rindió ante Messi y Suárez cuando ambos fueron sustituidos al minuto 65, recibiendo una ovación memorable en tierras catrachas.
El golpe final llegó al 79′, cuando el defensor Ryan Sailor cerró la goleada con un cabezazo que dejó sin reacción a la zaga olimpista.
Partido inolvidable
El pitazo final del árbitro Said Martínez decretó el fin de una noche histórica para el fútbol hondureño. Los jugadores del Olimpia, sin importar la derrota, se acercaron a Messi para tomarse fotos y pedirle su camiseta. Jerry Bengtson y Julián Martínez fueron los afortunados en quedarse con un recuerdo de «La Pulga».
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