Tegucigalpa, Honduras (15.10.2024). – En una destacada iniciativa de reforestación, el Instituto de Conservación Forestal (ICF), en colaboración con el Primer Batallón de Protección Ambiental y los alumnos de la escuela Juan Manuel Gálvez, han plantado 1,000 árboles nativos en el Parque Nacional Sierra de Agalta.
Entre las especies plantadas se encuentran frutales que no solo contribuirán al alimento de las comunidades locales, sino que también favorecerán la conservación de la vida silvestre, beneficiando a diversas especies de fauna como monos y aves.
La plantación de árboles nativos no solo ayuda a mitigar el cambio climático, sino que también promueve la biodiversidad y la sostenibilidad en la región.
Esta actividad ha generado un impacto positivo en la comunidad, creando conciencia sobre la importancia de cuidar el medio ambiente.
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