Tegucigalpa, Honduras (27.08.2024).- El secretario de Seguridad, Gustavo Sánchez, discutió en el Foro Libertad y Poder las reformas implementadas en la Policía Nacional y los desafíos enfrentados durante su administración.
Reordenamiento territorial policial
Sánchez explicó que, antes de su administración, Honduras contaba únicamente con dos jefaturas metropolitanas, una en Tegucigalpa y otra en San Pedro Sula.
En un esfuerzo por mejorar la gestión de la seguridad ciudadana, se decidió dividir el país en 23 nuevas jefaturas metropolitanas.
Esta reestructuración permite una gestión más eficiente al sectorizar grandes ciudades como Tegucigalpa y San Pedro Sula en áreas más manejables, cada una con su propio jefe policial.
El secretario destacó la importancia de este cambio: “Tegucigalpa, con una población de 2 millones, y San Pedro Sula, junto con el valle de Sula, ahora están divididos en cuatro y más áreas, respectivamente. Esto mejora nuestra capacidad para enfrentar los problemas específicos de cada zona”.
Reforzamiento del personal policial
Sánchez también abordó la situación del personal policial al inicio de la administración. Encontraron un déficit significativo con solo 16,000 funcionarios, cuando el país debería contar con alrededor de 30,000.
En respuesta, el Gobierno inició un proceso acelerado de reclutamiento que ha resultado en la incorporación de 5,000 nuevos oficiales.
Además, se espera sumar 4,000 más en 2025, con el objetivo de entregar al próximo Gobierno una fuerza policial de 25,000 miembros.
Desafíos en la depuración policial
El funcionario abordó el complejo tema de la depuración dentro de la Policía Nacional.
Afirmó que, se encontraron con un proceso de depuración cuestionado y costoso, que incluyó el pago de 30 millones de lempiras en demandas por despidos ilegales.
Aunque se separaron 6,000 funcionarios durante esta depuración, solo 168 casos han sido enviados a tribunales con bases sólidas.
Sánchez criticó el enfoque previo, indicando que la depuración no siguió el procedimiento legal adecuado, resultando en un daño significativo a la institución.
“Nosotros hemos realizado una depuración continua, con 2,800 policías cancelados en los últimos dos años, y de estos, 168 han sido enviados a tribunales competentes por casos sólidos. Esta administración se ha comprometido a seguir los procedimientos legales correctos”, expresó.
Estrategias y críticas
Sánchez también comentó sobre las críticas hacia las estrategias del Gobierno, subrayando que las reformas y medidas adoptadas están diseñadas para garantizar una policía más eficiente y libre de corrupción.
“En los medios se ha presentado a la Policía Nacional como el epicentro de la corrupción, mientras se ha ignorado la corrupción en otras instituciones. Estamos trabajando para abordar estas cuestiones de manera integral”, apuntó.
En resumen, Gustavo Sánchez ofreció una visión detallada de los esfuerzos por reformar y fortalecer la Policía Nacional, enfrentando tanto los desafíos estructurales como los problemas derivados de la depuración anterior.
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